¿Qué son las aplicaciones nativas para la nube?
Normalmente, el nivel de madurez de modernización “nativo de la nube” requiere nuevas inversiones de desarrollo. El traslado al nivel nativo de la nube normalmente se basa en la necesidad empresarial de modernizar las aplicaciones tanto como sea posible para mejorar notablemente la escala de las aplicaciones de gran tamaño mediante la creación de subsistemas autónomos (microservicios) que se pueden implementar y escalar de forma independiente de otras áreas de la aplicación, a la vez que se reducen los costos a largo plazo y se aumenta la agilidad de la evolución de esas partes de la aplicación autónoma que proporcionan importantes ventajas en términos de competitividad.
Los principales pilares de las aplicaciones nativas de la nube se basan en enfoques de arquitectura de microservicios, que pueden evolucionar con agilidad y escalar a límites que serían difíciles de lograr con una arquitectura monolítica, implementada en el entorno local o en la nube.
Un análisis rápido de las aplicaciones desarrolladas en la nube
El desarrollo de aplicaciones nativas de la nube suena como si fuera otra palabra de moda en el sector de TI, pero bien podría tratarse del avance que las empresas buscan para acelerar la innovación.
¿Qué necesito para diseñar una aplicación nativa de la nube?
Todo comienza con los miembros del personal de su empresa y los procesos de automatización que los ayudan a trabajar juntos. Esto implica reunir a sus equipos de desarrollo y de operaciones para que compartan un objetivo común y comentarios frecuentes mediante DevOps.
La adopción de contenedores es compatible con estas prácticas porque ofrece una unidad de implementación de aplicaciones ideal y un entorno de ejecución autónomo. Tanto DevOps como los contenedores permiten que los desarrolladores comercialicen y actualicen las aplicaciones en forma de servicios agrupados sin conexión directa con mayor facilidad, como en el caso de los microservicios, en lugar de tener que esperar un gran lanzamiento.
El desarrollo nativo de la nube se centra en la modularidad de la arquitectura, el sistema sin conexión directa y la independencia de sus servicios. Cada microservicio implementa una capacidad empresarial, se ejecuta en su propio proceso y se comunica a través de interfaces de programación de aplicaciones (API) o servicios de mensajería. Esta comunicación se puede gestionar mediante una capa de malla de servicios.
¿Qué es la arquitectura sin servidor?
El principal beneficio de una estrategia nativa de la nube es la capacidad de aumentar la velocidad de desarrollo de aplicaciones para las empresas que cuentan con recursos informáticos distribuidos en diferentes entornos. Por ejemplo, es posible que tenga algunos recursos alojados en los servidores de Amazon y de Google, así como una base de datos en Oracle que ejecuta localmente. Gracias al desarrollo en la nube, su empresa obtiene más beneficios de esta arquitectura de nube híbrida; sin embargo, puede tomar una medida adicional como parte de una estrategia original de la nube.
La promesa de las aplicaciones nativas en la nube
Una aplicación nativa en la nube se construye con una infraestructura basada en contenedores y con una arquitectura que se centra en los microservicios. Las aplicaciones nativas en la nube también utilizan la integración continua y la entrega continua (CI/CD). Los beneficios del enfoque de nube nativa incluyen los siguientes:
- Desarrollo acelerado: Con aplicaciones creadas sobre microservicios y sistemas de prueba integrados con implementaciones de producción, los equipos de desarrollo pueden actualizar, corregir y lanzar aplicaciones más rápido.
- Protección contra fallas: Debido a que los contenedores están aislados, una falla dentro de un contenedor no afectará a otros, lo que hace que una aplicación nativa en la nube sea inherentemente más confiable.
- Fácil escalabilidad: Una aplicación nativa en la nube puede autoescalar para manejar las futuras necesidades del negocio.
- Tecnologías abiertas: Las aplicaciones nativas en la nube suelen aprovechar las tecnologías de código abierto, además de enfocarse en la transparencia y la interoperabilidad.
¿Cómo reconocer a una aplicación nativa en la nube?
Los fundamentos de la nube son descritos usualmente como contenedores, administración dinámica y arquitectura distribuida modularmente. Sin embargo, se considera nativo en la nube a aplicaciones con 5 principios de arquitectura y 2 principios culturales:
- Empaquetado: encapsulamiento de aplicaciones con sus dependencias y ecosistema en un solo paquete. Lo que facilita el testeo, la migración y el despliegue.
- Administración dinámica: usar servidores basados en la nube flexibiliza su provisión a dedmanda. Si es una nube pública (como lo es usualmente), las compañías pagan solo por recursos cuando son usados.
- Microservicios: diseño de aplicaciones como una colección de pequeños, desintegrados componentes como servicios. Cada microservicio puede ser desplegado, mejorado, escalado y restaurado independientemente de los otros servicios en la aplicación, sin ningún impacto en el usuario final. Microservicios mejoran la velocidad al permitir a equipos desarrollar en paralelo y trabajar en estos componentes simultáneamente y de manera independiente, gracias a la eliminación de dependencia.
- Automatización: reemplazar tareas manuales como mantenimiento y actualización, con scripts o código de manera que ocurran de manera segura y sin problemas.
- Orquestamiento: unir todo al automatizar el despliegue, escalamiento y administración de las aplicaciones empaquetadas. Específicamente, usar Kubernetes (u otra herramienta de orquestramiento) para controlar y automatizar tareas como disponibilidad, provisionamiento y despliegue de containers, balance de cargas de containers, escalamiento hacia arriba o abajo mediante tareas predeterminadas.
Los dos principios culturales son:
- Delegación: ofrecer las herramientas, entrenamiento y discreción que necesita el equipo para realizar cambios, luego desplegar y monitorearlos de la manera más autónoma posible.
- Estrategia dinámica: comunicar estrategia a los equipos, pero permitirles modificar la estrategia en base a los resultados. Ese es el último propósito de un desarrollo rápido, experimental que las aplicaciones nativas en la nube proveen. No tiene finalidad correr experimentos si no se aplica lo que se aprende.
